Una mezcla que a pesar de lo diferentes, su sabor es sorprendente.

INGREDIENTES

• 750 g solomillo de cerdo, cortado en rodajas.
• 350 g bocas de buey cocidas, troceadas y chascadas.
• 250 g champiñones, laminados y limpios.
• 2 ajos cortados finos.
• 250 g caldo o agua.
• 100 g brandy.
• 40 g aceite de oliva virgen.
• 20 g almendras tostadas.
• Sal y pimienta.
• 250 g calabacín lavado, cortado en medias rodajas y hechos a la plancha.

PREPARACIÓN

1. Poner en una rustidera 20 g de aceite a fuego medio alto, salpimentar los solomillos, darles vuelta y vuelta, echarles las bocas cocidas por encima, tapar retirar y reservar.
2. Añadir en otra sartén el resto del aceite, una vez caliente echar los ajos y rehogar, cuando empiecen a tomar color incorporar los champiñones, el perejil picado y saltear.
3. Echárselo por encima a lo reservado, ponerlo a fuego alto. Cuando esté caliente rociarle el brandy y prenderlo, dejar hasta que se evapore el alcohol y se apague, para terminar tapar y dejarlo 5 ó 7 min., a fuego lento.
4. Mientras tanto tostar las almendras y hacer el calabacín a la plancha o en freidora por aire.

Emplatar poniendo en el centro del plato una ración, echarle por encima unas almendras, finalizar el plato con calabacín a la plancha.

Solo queda servir y disfrutarlo.