Esta receta es de mi madre, muchos las conoceréis, pero tienen alguna diferencia, ella no utilizaba leche, las hacia con agua, es la razón por la que son muy ligeras.

Al pasarlas por azúcar lo podemos hacer con azúcar de abedul, tiene muchas menos calorías y lo más importante, no sube el índice glucémico en sangre tanto, su sabor es más fresco y apenas se distingue de la normal.

INGREDIENTES

• 3 huevos
• 3 huevos de agua ( medirlos con el cascarón de uno de los huevos)
• Harina a ojo, sin pesar tiene que quedar una masa muy liquida, dependerá del tamaño de los huevos y el tipo de harina
• Ralladura de limón ( se puede poner otro aroma al gusto, canela, vainilla etc. )
• Abundante aceite para freírlas.
• Azúcar para pasarlas una vez fritas

PREPARACIÓN 

1. En un bol ponemos los huevos, el agua, el aroma (opcional ) y batimos.
2. Añadimos harina poco a poco hasta tener el punto de unas natillas ligeras, para que no salgan muy gruesas.
3. Ponemos el aceite en una sartén para freír y lo calentamos, ponemos también el molde dentro del aceite, así se calentara para después meterlo 3/4 en la masa y pasarlo en el aceite hasta deslizarse la flor y así sucesivamente con todas, hasta estar fritas.
4. Una vez doradas por un lado les damos la vuelta y cuando estén las sacamos y las ponemos en papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
5. Las  pasamos por azúcar y las colocamos en un recipiente grande, son muy frágiles y se rompen con facilidad.

Con esta receta salen unas 50 flores de molde pequeño.