Kaki y Persimon Tú Eliges

Mismo fruto distinta textura

Podemos decir que todo persimon es un tipo de kaki, pero no todo kaki es persimon.
La diferencia está en cómo se trata y en qué punto de maduración se consume.

Historia

El kaki (también conocido como caqui o palosanto) es una fruta originaria del este de Asia, especialmente de China y Japón, donde se cultiva desde hace más de 2.000 años. En Japón se le considera un símbolo de prosperidad y longevidad, y su nombre significa literalmente fruta de la estación fría. El kaki tradicional si no se come muy maduro con cuchara, su sabor es de aspereza y sequedad en la boca por su alta concentración de taninos.

A Europa llegó a mediados del siglo XIX, primero como árbol ornamental por sus hojas rojizas y frutos de color intenso, y más tarde como alimento. En España, el cultivo se popularizó sobre todo en la Comunidad Valenciana, donde el clima mediterráneo favorece su dulzura y textura.

El término “persimon” hace referencia a una variedad comercial española del kaki tipo Rojo Brillante, cultivada en la zona de la Ribera del Xúquer (Valencia), que gracias a un proceso con CO₂, alcohol o natural, pierden los taninos sin ablandarlo.
Así nace el persimon: un kaki firme, crujiente y dulce.

El Kaki Persimon® cuenta con Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) “Kaki Ribera del Xúquer”, reconocida oficialmente por la Unión Europea.

Gracias a esta innovación, el persimon se ha convertido en un producto de exportación muy apreciado en toda Europa.

Kaki y persimon en sus dos versiones, son frutas de otoño llenas de color, sabor y beneficios. Su textura versátil permite usarlos tanto en ensaladas, platos salados o postres, tú eliges cuál utilizar en cada una de ellos.

Beneficios

Rico en … antioxidantes: contiene betacarotenos, licopeno y vitamina C.
Fuente de fibra natural.
Aporta energía suave y sostenida: gracias a sus azúcares naturales y a su bajo índice de grasa.
Fortalece el sistema inmunitario.
Contribuye a la salud ocular.
Propiedades diuréticas y depurativas.